La interpretación y sus límites

 

Por: Gabrio Mendoza

La exégesis como ejercicio interpretativo de alta rigurosidad descansa sobre múltiples interrogantes, cómo, por ejemplo, aquellos que buscan indagar sobre sus límites y sobre la aparentemente excesiva profundidad que tienen las figuras de autoridad en una materia. En el campo de las artes y las humanidades esto es más visible. Vayamos a la pintura, ¿quién o quiénes determinan la trascendencia de una pintura para “canonizarla”? Sin duda, la crítica evalúa la técnica, los recursos y materiales, la maestría del artista con instrumentos de análisis que se van forjando a través del tiempo. Todo ello resulta comprensible dado que los valores pueden ser más verificables y constatables. Pero en torno al aspecto interpretativo, surgen cuestionamientos serios sobre la validez del valor asignado y cuesta determinar qué crítica es válida y cual no lo sería con base en sustentos que no dejan de pertenecer al reino de lo subjetivo.

Con Avelina Lésper, crítica mexicana, autora del famoso libro El fraude del arte contemporáneo, exploramos, a través de sus juicios, el desnudo masculino partiendo de distintos trabajos de pintores de diversas épocas. Sabemos que el tiempo como juez termina consagrando o relegando al olvido aquello que la época no aprobó o no le dio el reconocimiento. ¿Las tribunas del tiempo aplauden lo que deben aplaudir o todo se debe a un trabajo de la crítica que funge como árbitro? Difícil respuesta. De cualquier manera, ya contamos con un corpus de trabajos que permanecen y que hoy nos congrega en la Esquina Literaria, con un artículo de la autora citada, Lo que buscas no existe, publicado en un blog en 2014, para debatir sobre la importancia de la crítica y la autoridad conferida a las interpretaciones que a la postre brindan valor y precio a una obra, un punto álgido donde lo subjetivo pugna por volverse objetivo.

En el mismo espacio de la sesión de hoy, se presenta el cuento Bioluminiscencia, de la autoría del impopular Gabrio Mendoza, (¿fraude contemporáneo?) texto de breve extensión que apuesta por técnicas conocidas, pero que también intenta la experimentación. Un abrebocas para preguntarse sobre el valor estético, las expectativas fundamentadas sobre lo que debe o no tener un buen cuento o sí los experimentos riesgosos solo pueden ser asunto de aquellos representantes del género que ya demostraron su calidad previamente.

Una sesión con más preguntas que respuesta, ¿hasta dónde llega la luz y hasta qué abismo descienden los planteamientos irresolubles en apariencia?

Quédese y húndase.