Intromisiones

 



Por: Luis Vidal

 

La presencia de “los terceros” en las relaciones de pareja es un motivo recurrente en la literatura clásica. Sin ir más allá del acervo hispanoamericano, podemos recordar historias donde se establecen triángulos amorosos conflictivos y truculentos, tal es el caso de Talpa, de Rulfo; Cartas a mamá, de Cortázar o La intrusa, de Borges. En la noche de hoy, la Esquina pone sobre la mesa un par de relatos que exploran las relaciones de tres (no propiamente amorosas), pero ofrecen de particular, además de dos discursos y estilos disímiles, dos caras de la intromisión del otro: una que expresa, al parecer, un consentimiento tácito; y otra, una imprudencia lamentable. 

El primer cuento es Verde y negro, de Juan José Saer. Este se enmarca en la temática de febrero, a saber, el cuento erótico; y permite ir perfilando unas características del género. Fue incluido en la antología de cuento erótico en Argentina, a cargo de Mempo Giardinelli y Graciela Gliemmo (1998), en cuya introducción se destacan los matices de lo erótico que lo hacen diferente, con relación a otros relatos de la misma estirpe. En contrapunto, debatiremos también el cuento La mujer, de Juan Bosch, quien recrea la anécdota ocurrida “En un bohío”, otro de sus cuentos, para reafirmar una concepción popular sobre la vida marital. 

Ambos autores ya son de la casa. Así que los esperan, con afecto, para que metan su cuchara en la tertulia nocturna.

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