Por: Anabell Posada.
La Esquina Literaria da la palabra a dos grandes
escritoras: Natalia Ginzburg y Nadine Gordimer. Por un lado, Nadine Gordimer, de
una amplía producción literaria, ganadora del premio Nobel de Literatura en
1991, escritora sudafricana de la que leeremos el cuento El mejor safari. Esta historia permite reflexionar sobre las atroces
consecuencias de la guerra y las múltiples expresiones de la violencia, derivadas,
a su vez, de conflictos armados. El cuento es narrado desde la voz de una niña
que inicia el texto contando sobre su madre, quien se va para nunca regresar, luego
un padre que va a la guerra y que, seguramente, tampoco regresará. Sigue una
larga marcha y búsqueda de un lugar seguro para sobrevivir. En ese largo y
cruel desplazamiento se describe el hambre, el miedo, situaciones feroces e
inhumanas, en medio de leones, elefantes, sequía, y peligros de todo tipo que
acentúan el abandono, la tristeza y soledad de la mirada infantil que narra. La
niña desea regresar algún día al hogar para reencontrar y recordar la imagen de
su madre y padre y quizá, en ese reencuentro simbólico, recuperar todo aquello
de lo que ha sido despojada injusta y brutamente. En fin, un relato que
conmueve y confronta, un texto que no escapa de la historia sangrienta de
muchos pueblos y comunidades africanas, territorio que históricamente ha estado
marcado por el colonialismo, la explotación, el racismo, el saqueo, y la
injusticia despiadada.
Por otro lado, comentaremos el cuento La madre de Natalia Ginzburg, reconocida
escritora italiana, que se ha destacado por su sólida escritura de novelas,
relatos, cuentos y ensayos. En este texto íntimo y profundo, también desde la
mirada infantil, se nos revela una maternidad nada convencional o
estereotipada. A través del niño narrador se va dibujando la imagen de una
madre huidiza, silenciosa, triste, desentendida, poco “maternal”. Sumado a esta
ausencia, el padre de los niños ha muerto. Al tiempo que se teje esa
descripción de la madre, se va relatando todo lo que esperarían los niños que representara
una madre: cobijo, un lugar seguro, alguien fuerte que protege y abraza. Sin
embargo, ocurre todo lo contrario, la mujer toma una decisión definitiva:
decide quitarse la vida. Los niños se verán entonces enfrentados a cargar con
el peso de esa muerte. Otras figuras femeninas como la abuela, una tía, entran
a cumplir un lugar importante en el panorama familiar. Es un texto donde se
narra desde otra postura el hecho de ser madre, y las consecuencias emocionales
de unos niños que deciden recurrir al olvido de esa figura, pues evidentemente,
los afectos y vínculos afectivos, no están dados de manera natural, sino que se
construyen.
Maternidad, guerra, ausencias. Dos textos narrados
desde la mirada infantil que se enfrenta a la dureza del mundo. Situaciones violentas
de desarraigo, de verse arrancado del territorio protector del hogar, físico y
emocional. A lo que, en últimas, se puede responder desde el olvido o desde el
recuerdo.
Confío en tu criterio para escoger los cuentos, los que nos has traido me han gustado mucho.
ResponderEliminarLos temas son muy interesantes, ya que, en la infancia es donde se originan muchos trastornos; veo, por tu reseña, que los cuentos se complementan porque no solo ahondan en la parte emocional de un niño sino que también en los padecimientos físicos. ¡Preparándome para leer... !
Hola Yina. La esquina nos ha permitido a todos acercarnos a autores que no conocíamos gracias a las recomendaciones de los compañeros. Yo creo que los niños pasan por las mismas situaciones de los adultos, la guerra, la violencia, pues viven en el mismo mundo, la misma sociedad que nosotros. Pero tienes razón, la infancia es un territorio fundamental y determinante en lo que será el adulto. Nos vemos esta noche. 🌷
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